hotel palácio
El bar del Hotel Palacio en Estoril donde se reunían los espías
Portugal se definió como potencia neutral durante la Segunda Guerra Mundial, y sacó partido de ello. Por un lado, abrió la mano al bando aliado poniendo a su disposición sus bases aéreas en las islas Azores. Por otro lado, mantuvo relaciones comerciales con el III Reich, al que vendía tungsteno para los carros de combate. Los espías de ambos bandos situaron en Estoril su centro de operaciones.
Se dice que las victorias de las batallas se celebraban antes en el Hotel Palacio, un alojamiento de lujo en Estoril, que en las agencias de noticias. Centro de la diplomacia secreta, es el punto de partida del espía de ficción más famoso de todos los tiempos: James Bond. Ian Fleming, su creador, trabajo para el servicio de inteligencia británico y conoció en este hotel al doble agente yugoslavo Dušan Popov, en el que se inspiró.
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